Desde 1986 Porsche ofrece un programa de personalización de modelos, denominado Porsche Exclusiv, que permite a los clientes encargar un modelo único diseñado según sus deseos individuales. Porsche puede cumplir casi todos los deseos de los clientes, tanto en el ámbito del diseño como en el del rendimiento; la única condición es la practicabilidad técnica, legal y cualitativa. Adicionalmente a la fabricación individual para los clientes, Porsche Exclusive fabrica también pequeñas series excepcionales que se caracterizan, no sólo por la utilización de materiales selectos y el amor al detalle, sino también por tratarse de series con un número de ejemplares limitado.
El primer Porsche Exclusiv de serie pequeña es el 911 Turbo “construcción plana” con un diseño similar al del modelo de carreras del Tipo 935. Los faros abatibles en combinación con los guardabarros delanteros modificados le confirieron a esta variante de construcción plana del Tipo 930 un aspecto muy individual. Entre 1982 y 1989 se vendieron 984 unidades de este modelo.
En los años 1992/93 se fabricaron, en cooperación con Porsche Deporte del Motor, 86 unidades del 911 Tubo S de construcción ligera del Tipo 964. Con una potencia de 381 CV y una reducción de peso de 180 kilos, en comparación con el modelo de serie, este 911 marcó el rendimiento máximo de todos los 911 Turbo con un motor de 3,3 litros. En 1993 le siguió el modelo de serie del Carrera 2 Speedster del Tipo 964 que, por deseo especial de los clientes, Porsche Exclusive sólo fabricó 15 veces con el solicitado Turbo look. Además, se fabricaron 76 modelos del Tipo 911 Turbo 3,6, una variante del Turbo de construcción plana. Dos años después se fabricaron 14 modelos del 911 Turbo 3,6 Cabriolet del Tipo 993, ejemplares únicos para todos los conductores del Porsche amantes del sol y la velocidad. Uno de los modelos Porsche más exclusivos es el 911 Carrera 3.6 Speedster del Tipo 993 del que sólo se construyeron dos unidades en los años 1995 y 2000. En 1997/98 la tradición del motor bóxer refrigerado por aire llegó a su fin, temporalmente, con el estreno de la pequeña serie Exclusive del 911 Turbo S del tipo 993. En total se fabricaron 345 unidades de este modelo que, junto con un diseño exterior individual, ofrecía 42 CV más de potencia que el Turbo de serie.
Durante la celebración del Salón del Automóvil IAA 2009, Porsche Exclusive reactivó la tradición de las pequeñas series con el 911 Sport Classic del que sólo se fabricaron 250 unidades. Este fue un exitoso comeback. El potente motor bóxer de 408 CV, el diseño exterior individual, el legendario “Entenbürzel” (cola de pato) del Carrera RS 2.7 de 1973 y un interior decorado con los más finos materiales convirtieron esta serie en una obra maestra que se agotó rápidamente. Porsche Exclusive presentó la siguiente serie limitada en 2011 con motivo de su 25 aniversario. El 911 Speedster, basado en el Carrera S del Tipo 997, se compromete, sin embargo, con el parabrisas recortado tradicional del modelo 356 Speedster, por lo cual la serie se limitó a 356 unidades. En 2012, Porsche Exclusive fabricó un modelo muy especial en agradecimiento a la lealtad del Club Porsche: el 911 Club Coupé. De acuerdo con el número inicial de socios de los dos primeros Clubs de Porsche en el año 1952 se fabricaron 13 unidades de este modelo. 12 de ellos se vendieron a miembros del Club Porsche que se habían apuntado al sorteo de los automóviles previamente. El ejemplar número 13 se encuentra en el museo de Porsche en conmemoración al mundo del Club Porsche.